Las cajas o empaques suajados son muy útiles para productos que requieren de ser transportados de maneras específicas, ya sea para salvaguardar su calidad, para mejorar su presentación o para darle una identidad propia.
Pero ¿qué hace de un empaque suajado algo especial? ¿Cuál es la diferencia con las cajas comunes que se ofrecen? y ¿cuáles son los productos que más se benefician de una caja de este tipo? Te lo explicamos.
El suaje es la diferencia
Las cajas y empaques suajados están cortados con un suaje, lo cual es obvio, pero ¿qué es un suaje? Es una herramienta hecha de acero con una forma específica para cortar distintos materiales suaves, entre ellos el cartón corrugado, para darles una configuración exacta. Esta configuración, en el caso de los empaques, es la que permite que, al doblar y darle forma al cartón, se pueda confeccionar a manera de cajas, insertos, rejillas y medias cajas, además de separadores, charolas y cajas autoarmables, entre otros; dándole toda la rigidez y fuerza necesarias para almacenar o transportar un producto. Estas cajas son mucho más confiables precisamente porque dependen de la geometría del corte y no de la resistencia de algún pegamento.
El Empaque Suajado es para Todos
Es cierto que hay algunas industrias que han acogido de mejor manera a los empaques suajados pero en realidad, cualquier producto puede beneficiarse de una caja hecha a su medida. Si pensamos, por ejemplo, en los electrónicos, como consolas de videojuegos, cámaras fotográficas, teléfonos celulares y demás productos que suelen ser transportados internacionalmente, se debe considerar que requieren de un recubrimiento específico llamado Michelman, que los protege evitando la humedad existente en altamar.
En el caso de la industria restaurantera, los empaques suajados se han convertido en una excelente alternativa, más segura, más estética y mucho más sustentable que el unicel o el plástico. Las pizzerías, por ejemplo, han utilizado las cajas suajadas de cartón corrugado por décadas, por su capacidad para mantener la temperatura y calidad de sus productos.
Por último, los elementos de diseño y diferenciación de marca son fácilmente obtenidos con este tipo de empaques hechos a la medida y a las necesidades de cada producto, añadiendo a la identidad del producto y convirtiéndose en una herramienta mercadológica más.
Realmente podríamos decir que cualquier empresa que priorice la calidad, la identidad y la utilidad con relación al resguardo y transporte de sus productos, verá a los empaques suajados como su primera opción.
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